Dímelo Dios, quiero saber…

Dime, ¿por qué la gente no sonríe?
¿Por qué las armas en las manos?
¿Por qué los hombres malheridos? Dime.
Dime, ¿por qué los niños maltratados?
¿Por qué los viejos olvidados?
¿Por qué los sueños prohibidos? Dime.

No son simples interrogantes. Son preguntas dirigidas a Dios. Al mismo Dios que las Escrituras Bíblicas presentan como el Todopoderoso, Justo y Bondadoso. Preguntas que nosotros en algún momento también las hicimos buscando encontrar una respuesta al porqué de las desdichas, las guerras, la violencia, la injusticia, la indiferencia, las sequias y los desastres naturales. Cuestionamientos que José Luis Perales le dio forma de canción:

Dime, ¿por qué los cielos ya no lloran?
¿Por qué los ríos ya no cantan?
¿Por qué nos has dejado solos? Dime.
Dime, ¿por qué las manos inactivas?
¿Por qué el mendigo de la calle?
¿Por qué las bombas radioactivas? Dime.

“¿Por qué nos has dejado solos?...”
Este es el cuestionamiento más conmovedor
Creo que resume el clamor de toda la humanidad. La soledad, el abandono, y la impotencia que todas las generaciones han experimentado al ver que a pesar siglos de “civilización” seguimos experimentando los mismos males. ¿Dónde está Dios? Y si Dios está presente ¿por qué no actúa?... es como si no existiera.

Dímelo Dios, quiero saber, dime ¿por qué te niegas a escuchar?
¿Aún queda alguien que tal vez rezará?
Dímelo Dios, quiero saber, ¿dónde se encuentra toda la verdad?
¿Aún queda alguien que tal vez lo sabrá?
…Pero yo no.

Hace unos días oí esta canción después de varios años, y me gusta por la sinceridad y exigencia que manifiesta en la búsqueda de la verdad. Fue compuesta hace más de tres décadas y muchos siguen identificándose con su letra, y muchos también han hallado la respuesta. Desconozco si el autor ya la conoce, pero la verdad es que su oración, hace siglos que fue respondida en las páginas de la Biblia.

Aunque pareciera lo contrario, Dios no nos ha abandonado. La Biblia enseña que en realidad somos nosotros los que nos hemos alejado de él. Y somos nosotros, los seres humanos, los que matamos, herimos y mentimos, haciendo de este mundo lo que es. ¿Podemos culpar a Dios por ello?

Dios no está de brazos cruzados. Él nos sigue amando*, y ha enviado a su Hijo (quien es La Verdad) para guiarnos nuevamente hacia él. Por la obra de Jesucristo, Dios ofrece perdón, restauración, regeneración y transformación a toda la humanidad. Pero sucede que la mayoría de gente no quiere cambiar, no quiere obedecer a Dios, no quiere volver a él. ¿Qué puede entonces hacer Dios? ¿Debe imponernos una decisión y obligarnos a hacer lo correcto? No lo hará. Pero Jesús regresará y establecerá su gobierno con autoridad, justicia y paz, y hará “nuevas todas las cosas”* con aquellos que sí lo aceptan como Señor y Salvador. Y entonces se conocerá lo que es una civilización con Dios presente. Por supuesto, todos los que persistieron en seguir alejados de él no podrán participar de ella*.

Y si sabemos del porqué el mundo está así; y sabemos lo que Dios hará; entonces debemos saber bien que decisión tomar. Pues Dios también quiere saber... y él pregunta: “Dime, ¿y tú qué harás?”

*Romanos 3:23,24; Juan 3:16; Apocalipsis 21:1,5,8


Publicado el 23 de enero del 2011

Comentarios

  1. Anónimo27.1.19

    jajajajaja, claro que si, digamos que dios está esperando que los niños huérfanos, los desamparados, que a diario mueren de hambre, sed y por crueles enfermedades, que no tienen una guía, o que por desgracia nacieron en un país en el que creen en el dios "incorrecto", se acerquen a él, claro, pobres niños recien nacidos o que no tienen la edad suficiente para entender el concepto de "dios", pero claro primero deben adivinar cual es el "dios" correcto, lo bueno es que de acuerdo a estas estúpidas excusas para justificar creencias, estos pobres niños solo fingen el sufrimiento, y su muerte es indolora, gracias por aclararme todo, eres un iluminado.

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  2. Bueno el articulo. Lo malo de esa canción es que la gente que no conoce de las Escrituras empieza a culpar a Dios por las consecuencias de las malas decisiones que el hombre toma por su propia voluntad. Desde el principio la voluntad de Dios fue que viviera en libertad y en paz, pero el pecado hizo que todo se corrompiera. Bien esta escrito en Zacarías 7:8-10 8 Recibió también Zacarías esta palabra de Jehová:9 «Así habló Jehová de los ejércitos:
    Juzgad conforme a la verdad; haced misericordia y piedad cada cual con su hermano; 10 no oprimáis a la viuda, al huérfano, al extranjero ni al pobre,
    ni ninguno piense mal en su corazón contra su hermano.» y en el capítulo 8:16- 17 16 Éstas son las cosas que habéis de hacer: Hablad verdad cada cual con su prójimo; juzgad según la verdad y lo conducente a la paz en vuestras puertas. 17 Ninguno de vosotros piense mal en su corazón contra su prójimo, ni améis el juramento falso, porque todas éstas son cosas que aborrezco, dice Jehová.»

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  3. Dios no se niega a escuchar, él siempre escucha. Pero la gente, en especial los seguidores de sectas, esperan que Dios les resuelva su problema como arte de magia. Dios podría matar a los malos, perversos y culpables de este mundo, ¿ y el corazón del hombre? piden y piden soluciones, pero no quieren rendirse a Dios, no quieren obedecer a sus mandatos, no quieren dejar de odiar, no están dispuestos a dejar rencor, perversiones, borracheras, lujuria...Dios espera un cambio de corazón voluntario, no obligado por temor o por recibir recompensa.

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  4. Toda la razon dios nos espera a cada momento de nuestra integridad y servicio y respeto hacia él...y el no tiene la culpa de los desastres en el mundo entero. El tonto que escribio el primer resumen ahi arriba no sabe ni un caraJo sobre dios y obediencia.....tonto estudia....

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  5. Anónimo25.11.22

    Dios es un caballero, nos dejo en su palabra la manera de comportarnos, entre esposos entre padres e hijos entre hermanos y poder conquistar en consecuencia la paz la armonía el bienestar el amor entre los seres humanos y practicar la hermandad la solidaridad atreves del respeto a los semejantes y la naturaleza y caminar de su mano siendo el nuestro guía, nuestro proveedor, nuestra luz, nuestra fortaleza, nuestro escudo, nuestro consolador. pero no queremos saber nada de su ley y nos hemos desviado sintiéndonos dioses autosuficientes y la desgracia se a propagado y a alcanzado a nuestra descendencia dios no se va a meter donde no lo llaman no va a ayudar a quien no le pide la ayuda pero es piadoso cuando intercedemos unos por otros y podría ayudarnos aun en contra de la voluntad nuestra.
    por hay esta la respuesta "dios es un caballero y nos ama y esta a la espera de que lo invoquemos"

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