Entradas

Mostrando entradas de octubre, 2010

Señor de los Milagros… ¿Patrono del Perú?

Imagen
No, el Señor de los Milagros no es Patrono del Perú. Pudo serlo, pues así era la intención del proyecto de ley antes que fuese promulgada. Pero con prudencia y sensatez, se ha declarado a la imagen del Señor de los Milagros “Patrono de la espiritualidad religiosa católica del Perú”. Y no podía ser de otra manera, pues en un país cuya constitución contempla la libertad de cultos e igualdad sin distinción de credos, hubiese sido tremenda contradicción declararlo “patrón de todos los peruanos”, incluyendo a los que no creen en él, ateos, ó creyentes que no concuerdan con la adoración (ó veneración) a imágenes religiosas.

Instrucciones para tiempos peligrosos

Para sobrevivir en este mundo y en estos tiempos, hay que hacer caso a las advertencias de la historia y las instrucciones del ayer. Hubo expertos en el pasado, que, como si hubiesen visto y oído las noticias del futuro, dejaron por escrito instrucciones para el presente. Uno de esos analistas, un superviviente moral de su época, fue el rabino judío Saulo de Tarso. Más conocido como el apóstol Pablo. Esta es su advertencia*:

Ya elegimos… ¿ahora qué?

Ya elegimos a nuestras autoridades distritales, provinciales y regionales. ¿Y ahora qué? Lo primero: Aceptar los resultados y respetar la decisión de la mayoría. Hay que someterse a las leyes de la democracia tal como lo enseñó el apóstol Pedro*: “Por causa del Señor sométanse a toda institución humana, ya sea al rey… a los gobernadores…” al voto popular, al ONPE, al JNE. Los que no fueron elegidos no deben acusar de fraude sin pruebas, ni llamar irresponsablemente a las protestas y a la violencia. Todos los ciudadanos debemos apoyar el orden, la paz y el respeto mutuo si en verdad se desea el bien del pueblo. “Porque esta es la voluntad de Dios: Que haciendo el bien, hagamos callar la ignorancia de los hombres insensatos”. Por eso, dejando de lado todo interés particular y partidario, sería bueno que todas las agrupaciones pongan a disposición de la autoridad elegida, su sincera intención de apoyar, concertar y compartir sus planes de gobierno; pues en los mítines y los debates h

La vida no es un referéndum

Imagen
Su vida no se somete a ningún referéndum. Los demás no tienen porque decidir por usted. Ni su madre, ni su pareja, ni sus amigos, ni la sociedad deben hacerlo. Usted es quien decide en su vida y lo que será en el futuro. En democracia, los gobernantes son elegidos por mayoría de votos, y ciertos asuntos se deciden por consulta popular por medio de referéndums, pero la vida personal no. Y a pesar de que nuestras vidas no están regidas por la democracia, muchos se han acostumbrado a tomar decisiones basados en la opinión de los demás, en el “qué dirán”, como si sometieran su vida a un continuo referéndum.